El pasado 26 de abril se reunió en Pamplona personal técnico de las administraciones de Burgos, La Rioja, Álava, Aragón y Navarra, científicos de distintas universidades y equipos de asistencias externas de proyectos relacionados con el águila de Bonelli o perdicera, para compartir experiencias y resultados del trabajo llevado a cabo con el objetivo de invertir la tendencia poblacional regresiva que en la actualidad presenta esta rapaz.
Toda la zona del Alto Ebro ha compartido con el resto de la Península Ibérica el declive poblacional del águila de Bonelli, pero tiene como añadido su ubicación en una zona crítica, el límite septentrional de la distribución global de esta rapaz, lo que hace que sean poblaciones marginales que tienen que hacer frente a mayor número de factores limitantes. El caso de la provincia de Burgos es muy representativo del descenso poblacional de la especie, con un drástico declive, pasando de tener 46 territorios en la década de los años setenta a solamente uno en la actualidad.
A pesar del alto esfuerzo que están realizando las distintas administraciones, está siendo difícil recuperar los niveles históricos de parejas en las poblaciones del Alto Ebro. Pero los resultados son esperanzadores, ya que por ejemplo en Navarra, gracias a los proyectos de reintroducción realizados (AQUILA a-LIFE y LIFE Bonelli), en la actualidad ya existen dos territorios recuperados, otro nuevo creado y otro posible a caballo entre La Rioja y Navarra.
En toda la cuenca alta del Ebro se constata un gran cambio en la aptitud del hábitat para el águila de Bonelli: la desaparición del paisaje en mosaico, la conversión de los campos de cultivo de secano a regadío, el declive de la ganadería extensiva, la matorralización y forestación y el aumento de la presión antrópica, con la consiguiente reducción de la disponibilidad de presas para la especie.
Factores más limitantes
Después de escuchar las distintas ponencias presentadas en el encuentro de Navarra, que contó con la asistencia de unas veinte personas, todos los expertos y expertas coincidieron en que los factores más limitantes para la recuperación del águila de Bonelli son, por una parte, que presenta altas mortalidades, con la electrocución como primera causa, y por otra, que las parejas actuales tienen poco éxito reproductor. Ante esta situación se acentúa la importancia de todo el trabajo encaminado a reducir las causas de mortalidad, cobrando especial relevancia la corrección de tendidos eléctricos, tanto en las áreas de suelta y reproducción como en las de dispersión, ya que esta especie es especialmente sensible a la electrocución.
Navarra y Álava expusieron su actual participación en AQUILA a-LIFE (LIFE16 NAT/ES/000235), financiado por la Unión Europea de manera conjunta con Madrid, Mallorca y Cerdeña. Este proyecto de reintroducción tiene por objetivo aumentar la extensión de la presencia del águila de Bonelli en el Mediterráneo occidental e invertir su tendencia poblacional regresiva. Para ello contempla no solamente la reintroducción si no también abordar las principales amenazas actuales para la especie, con especial dedicación a prevenir y reducir las electrocuciones.
Aragón este año se va a sumar a los trabajos de reforzamiento poblacional, al comenzar con un nuevo proyecto de reintroducción en la sierra de Guara (Huesca). La Rioja y Burgos cuentan también con un largo camino en el seguimiento y control de la especie, así como en el estudio y reducción de causas de mortalidad, en los que seguirán invirtiendo todos sus esfuerzos con la esperanza de que continúen dando sus frutos.
Un trabajo en conjunto
La exposición en común de los problemas ha puesto en relieve la importancia de aunar esfuerzos, compartir resultados y buscar soluciones comunes que contribuyan a tener una visión más global de la situación y prioricen los esfuerzos a realizar, para que actuando de manera local se consigan mejoras a nivel global en la población del águila de Bonelli de la Península Ibérica.
Más sobre AQUILA a-LIFE
El proyecto AQUILA a-LIFE, que estará operativo hasta septiembre de 2022, está coordinado por GREFA y también participan como socios la Diputación Foral de Álava, la Fundació Natura Parc (Mallorca), Gestión Ambiental de Navarra-Gobierno de Navarra, ISPRA (Italia) y LPO/BirdLife (Francia). Apoya la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Más información, en http://aquila-a-life.org
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