El programa de reforzamiento poblacional del águila de Bonelli desarrollado dentro del proyecto AQUILA a-LIFE está lleno de altibajos. Al duro golpe de la muerte de "Leo" por una posible depredación natural, el macho de la nueva pareja del valle de Kanpezu (Álava), le ha seguido la novedad esperanzadora de que la hembra, "Soraia", se ha emparejado ya con "Hegoi", un ejemplar subadulto sin emisor.
El pasado mes de febrero, cuando "Soraia" y "Leo" estaban a punto de iniciar la reproducción por segundo año consecutivo en la Montaña Alavesa, comprobamos por las señales GPS algo preocupante: el emisor de "Leo" se había detenido cerca de uno de los arroyos tributarios del río Izki. Rápidamente los guardas forestales y de parques naturales de Álava se personaron en el lugar y comprobaron que el macho de águia de Bonelli yacía muerto y parcialmente consumido, como se aprecia en la siguiente fotografía:
Gracias al radioseguimiento sabemos que "Leo" murió de forma repentina hacia las 18:15 horas del pasado 15 de febrero. También sabemos que los dos días anteriores este ejemplar había estado muy agitado, realizando continuos vuelos, inusuales tanto por su duración como por su ubicación, lo que nos induce a pensar que quizás estaba defendiendo el territorio frente a algún intruso. A la espera de conocer los resultados de la necropsia oficial, cuando recogimos a "Leo" el cadáver estaba decapitado y parcialmente consumido, presentando varias heridas incisas entre las costillas y la quilla, compatibles con una posible depredación por ave rapaz.
'Hegoi' entra en escena
El mismo día que recogimos a "Leo" observamos en el territorio otro ejemplar de águila de Bonelli, en este caso un subadulto de dos años, que por su tamaño relativo con respecto a "Soraia", parecía ser un macho. El nuevo ejemplar, al que llamaremos "Hegoi", se comportó desde el primer día como un macho territorial: volando continuamente con la hembra "Soraia", realizando vuelos de marcaje de territorio, acosando a los buitres que se atrevían a volar en los cortados de nidificación y posándose junto a la hembra "viuda".
La naturaleza no entiende de duelos, no se los puede permitir: tres días después de la muerte de "Leo", su sustituto compartía con "Soraia" el territorio, utilizando sus mismos posaderos y realizando aportes de ramas en los dos nidos que la antigua pareja tenía preparados para la reproducción. El 21 de febrero observamos a "Hegoi" copulando en tres ocasiones con "Soraia" y durante la última semana del mes se han comportado como una pareja consolidada, volando juntos, sin apenas separarse, recargando los nidos en uso, copulando y traspasándose las cebas en vuelo.
Siguiendo siempre a "Soraia", "Hegoi" conoce a la perfección el antiguo territorio de "Leo", utilizando los mismos posaderos y dormideros, e incluso ya ha comenzado a frecuentar los cebaderos elevados donde aportamos alimentación suplementaria a la pareja durante el periodo reproductor.
El nuevo macho territorial está sin marcar. Por el plumaje, con la primera muda de las rectrices ya completa y una muda todavía parcial de las régimes primarias y secundarias, sabemos que "Hegoi" es un subadulto de segundo año (nacido en 2020), mientras que "Leo" era un ejemplar de cuatro años procedente del centro de cría en cautividad de Christian Pacteau (Francia).
Futuro esperanzador
Puede pensarse que el proyecto AQUIA a-LIFE ha dado un paso atrás cambiando un macho ya adulto por otro subadulto, que quizás pierda la reproducción de esta temporada y tarde un tiempo en poder reproducirse con éxito. No obstante, el proceso de sustitución ha sido muy rápido, casi vertiginoso, y no descartamos un intento de reproducción esta misma temporada.
Tendremos que esperar a que avance la primavera para, una vez superado el periodo reproductor, capturar y radio-equipar al nuevo "inquilino". Ello nos permitirá una mejor monitorización de la pareja reproductora y comprobar si el uso del espacio efectuado por "Hegoi" difiere sustancialmente del realizado hasta ahora por "Leo". Mientras tanto tendremos que intensificar el seguimiento visual y seguir el proceso de consolidación de la pareja y los posibles cambios en el uso del territorio.
Desde el punto de vista de la conservación del águila de Bonelli en el País Vaco, la sustitución de "Leo" por "Hegoi" es una buena noticia: demuestra que existe todavía una población flotante capaz de reponer las bajas que indefectiblemente se han de producir entre los ejemplares introducidos mediante "hacking" o crianza campestre, que los ejemplares introducidos en Álava tienen además un efecto llamada sobre
otros ejemplares de águila de Bonelli procedentes de otras regiones peninsulares y que el territorio formado en la Montaña Alavesa gracias al proyecto Aquila a-LIFE tiene porvenir.
Más sobre AQUILA a-LIFE
El proyecto AQUILA a-LIFE (LIFE16 NAT/ES/000235), financiado por la Unión Europea, quiere contribuir a aumentar la extensión de la presencia del águila de Bonelli en el Mediterráneo occidental e invertir su tendencia poblacional regresiva. Para ello se contempla la liberación de ejemplares en España e Italia (Cerdeña), así como abordar las principales amenazas actuales para el águila de Bonelli, con especial dedicación a prevenir y reducir las electrocuciones.
El proyecto AQUILA a-LIFE, que estará operativo hasta septiembre de 2022, está coordinado por GREFA y también participan como socios la Diputación Foral de Álava, la Fundació Natura Parc (Mallorca), Gestión Ambiental de Navarra-Gobierno de Navarra, ISPRA (Italia) y LPO/BirdLife (Francia). Apoya la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Más información, en https://aquila-a-life.org
YA FUE NOTICIA
El águila de Bonelli se reproduce por primera vez en los últimos 40 años en la Montaña Alavesa