Como todos sabemos la electrocución es la principal causa de mortalidad de gran parte de las rapaces españolas. Según cifras oficiales del Ministerio para la Transición Ecológica se habla de 30.000 ejemplares muertos al año por esta causa. Por ello, dentro del proyecto AQUILA a-LIFE las acciones de transmisión del conocimiento son esenciales. Unas recientes jornadas en Albacete a las que asistieron varios miembros de GREFA, organización que coordina AQUILA a-LIFE, son buen ejemplo de ello.
AQUILA a-LIFE ha estado presente en el curso “Alerta tendidos: electrocuciones de avifauna”, que tuvo lugar en el Centro de Formación Medioambiental de Albacete, entre el 21 y el 24 de octubre, y al que asistieron unos cincuenta participantes. Nuestra presencia se concretó a través de las intervenciones de nuestros compañeros de GREFA Irene López (veterinaria) y Juan José Iglesias (biólogo), que el primer día de las jornadas impartieron sendas charlas.
La charla de Irene López versó sobre las necropsias como herramienta de diagnóstico de delitos ambientales y la de Juan José Iglesias sobre la prospección de líneas peligrosas dentro y fuera de las zonas prioritarias del Real Decreto 1432/2008.
Posteriormente, el 23 de octubre, nuestro colaborador Justo Martín estuvo hablando sobre la aplicación que utiliza GREFA para caracterizar tendidos eléctricos peligrosos para las aves y el uso de nuevas tecnologías para facilitar esta labor.
Profesionales del sector agrario, forestal, medioambiental y personas del medio rural asistieron a este curso formativo. El objetivo último ha sido sensibilizar a todos los niveles posibles sobre la gravedad de las electrocuciones de aves y hacer propuestas para evitar en lo posible esta mortandad.
Desde AQUILA a-LIFE y GREFA queremos agradecer la oportunidad brindada de formar parte de este curso, donde hemos estado acompañados de grandes profesionales en la materia.
Más sobre AQUILA a-LIFE
El proyecto AQUILA a-LIFE (LIFE16 NAT/ES/000235), financiado por la Unión Europea, quiere contribuir a aumentar la extensión de la presencia del águila de Bonelli en el Mediterráneo occidental e invertir su tendencia poblacional regresiva. Para ello se contempla la liberación de ejemplares en España e Italia (Cerdeña), así como abordar las principales amenazas actuales para el águila de Bonelli, con especial dedicación a prevenir y reducir las electrocuciones.
El proyecto AQUILA a-LIFE, que estará operativo hasta 2022, está coordinado por GREFA y también participan como socios la Diputación Foral de Álava, la Fundació Natura Parc (Mallorca), Gestión Ambiental de Navarra-Gobierno de Navarra, ISPRA (Italia) y LPO/BirdLife (Francia). Más información, en http://aquila-a-life.org
