El Programa Avilínea, del Govern de les Illes Balears y ENDESA, sigue apostando por mejorar la red eléctrica en Mallorca para evitar más electrocuciones de rapaces y, específicamente, del águila de Bonelli. Los sesenta tendidos ya corregidos recientemente tendrán su continuidad en la adecuación de otros nuevos próximamente. En este proceso tan positivo, la información aportada desde AQUILA a-LIFE está siendo de gran importancia para desarrollar las correcciones y demás medidas previstas en la isla balear.
En 2017 desde AQUILA a-LIFE se entregó un listado de 73 apoyos prioritarios para el águila de Bonelli al Gobierno Balear. Pues bien, en junio de 2018 ya habían sido corregido 59 de ellos, con fondos autonómicos y de la compañía eléctrica. Un total de 9 tendidos más se corregirán este otoño. Además, también se han aislado ocho apoyos más donde habían muerto otras aves electrocutadas, en áreas frecuentadas por el águila de Bonelli y que, por tanto, beneficiarán a esta especie.
Pero aquí no acaban las novedades positivas: los técnicos del proyecto AQUILA a-LIFE en Mallorca (Fundació Natura Parc) han preparado una nueva remesa de 90 apoyos más que deben ser corregidos en Mallorca, para hacer disminuir el riesgo de electrocución en todos los territorios de cría y en las principales áreas de dispersión del águila de Bonelli en la isla. Este listado se ha remitido al Programa Avilínea que desarrollan el Gobierno Balear y la compañía eléctrica Endesa y será tenido en cuenta en las correcciones previstas para 2019.
En los últimos dos años se están modificando apoyos a un ritmo mayor en Mallorca gracias a que Endesa está aumentando los recursos propios que destina a esta medida, lo cual se reconoce y se agradece desde AQUILA a-LIFE. Este esfuerzo se está notando ya que ha disminuido la frecuencia de electrocuciones de águilas de Bonelli en Mallorca, cuyos ejemplares están siendo seguidos telemétricamente gracias a emisores de localización GPS que llevan a su espalda.
El proyecto AQUILA a-LIFE (LIFE16 NAT/ES/000235), financiado por la Unión Europea, quiere contribuir a aumentar la extension de la presencia del águila de Bonelli en el Mediterráneo occidental e invertir su tendencia poblacional regresiva, para ayudar a la restauración de los ecosistemas donde habitaba antaño la especie. Para ello se contempla la liberación de ejemplares en España e Italia (Cerdeña), así como abordar las principales amenazas actuales para el águila de Bonelli, con especial dedicación a prevenir y reducir las electrocuciones. El proyecto AQUILA a-LIFE, que estará operativo hasta 2022, está coordinado por GREFA y también participan como socios la Diputación Foral de Álava, la Fundació Natura Parc (Mallorca), Gestión Ambiental de Navarra-Gobierno de Navarra, ISPRA (Italia) y LPO/BirdLife (Francia).
