Donjimeno y Cabezas de Alambre son dos municipios colindantes de la comarca de La Moraña, al norte de la provincia de Ávila. En ese territorio el Equipo Tendidos de AQUILA a-LIFE revisó el pasado mes de enero 74 apoyos eléctricos, encontrando al pie de 24 de ellos los restos de 36 aves rapaces electrocutadas. Tras el estudio de los cadáveres y restos encontrados se pudo determinar que la especie afectada en mayor medida fue el busardo ratonero, con 19 ejemplares, pero no fue la única.
Además de los 19 ratoneros se localizaron 3 milanos negros, 2 águilas calzadas, 2 azores, 2 gavilanes, 1 halcón peregrino y otros 7 individuos en los que el estado de los restos encontrados no permitió, por el momento, precisar con exactitud la especie a la que pertenecían. Se trata de una zona de campeo por excelencia para el milano real. Además, a muy poca distancia se tiene constancia de que cría el águila imperial. Ambas especies están catalogadas en España como "En peligro de extinción". También es un área de campeo del águila de Bonelli.
La Moraña abulense forma parte de la comarca castellana de Tierra de Campiñas, que también se extiende por las provincias vecinas de Valladolid y Salamanca. De águila imperial se conoce la electrocución en la ZEPA Tierra de Campiñas de algún ejemplar marcado por GREFA. De milano real el Equipo Tendidos de AQUILA a-LIFE ha localizado varios cadáveres junto a postes eléctricos en otros puntos de la provincia de Ávila. Igualmente, en Tierra de Campiñas existe constancia de la electrocución de algunas águilas de Bonelli, posiblemente en dispersión.
Mucho trabajo por hacer
Toda esta información recopilada en la revisión de tendidos eléctricos dentro del marco del proyecto AQUILA a-LIFE, en este caso en la provincia de Ávila, se ha hecho llegar puntualmente a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, por ser el organismo competente para exigir la adopción de las medidas que permitan eliminar esos "agujeros negros" que devoran sin descanso, un día sí y otro también, buena parte de nuestra fauna salvaje. Pero mientras esperamos a se pongan los medios que minimicen de una vez por todas el efecto de los fatídicos tendidos, seguirán electrocutándose aves.
Pensemos que en España hay más de ocho mil municipios, con cientos de miles de postes y torretas eléctricos. El Equipo Tendidos de AQUILA a-LIFE lo integra actualmente una treintena de voluntarios concentrados mayoritariamente en la zona centro peninsular y en Baleares. Hay por lo tanto inmensas zonas en las que nadie sabe lo que está ocurriendo, zonas donde decenas de cadáveres como los que hemos encontrado en La Moraña simplemente se pudren ignorados por todos.
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